Durante tiempo había algo de menos en nuestras vidas, pasamos una parte de ellas perdidos en un mundo de tinieblas en el que no había respuestas a casi nada, salvo las inercias. Y hace ya mucho que nos convencimos de que el CAMBIO es el único motor de la vida. Para las filosofías orientales TODO está en contínuo movimiento; un día lo descubrimos, y decidimos movernos con el todo, para no quedarnos estancados.
Uno de nuestros pilares de trabajo interior, en la actualidad, es la GRAFOTERAPIA. Hace ya algunos años que entrenamos nuestra escritura en un modelo de armonización interior y de eficiencia energética del movimiento. El gesto escritural es un reflejo de las redes neuronales que tenemos en activo en cada momento, y trabajando la escritura se puede modificar el cerebro. Sí, se puede!!!, eso sí, con trabajo, trabajo y mucho trabajo. Así que hace unos años que nos propusimos REAPRENDER A ESCRIBIR, y de esta manera, REAPRENDER A SER, con todas las consecuencias.
Vienen siendo años de muchos cambios y mucho trabajo, pero también apasionante es reencontrarse a uno/a mismo/a en actitudes que creía haber perdido y que son utiles para la vida, conquistando más autonomía y sintiéndonos, cada vez más, dueños de nuestro camino.
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| ejercicios de Grafoterapia Racional |
Otra vía es la MEDITACION. Eso de lo que tanto se habla y que tan difícil parece.... La meditación es bajar el volumen del ruido mental, con diferentes técnicas. Para nosotros meditar no siempre es sentarnos a no hacer nada y tratar de apartar los pensamientos que nos asaltan. Meditar es una práctica que aplicar a cada rato de la vida. Meditamos en silencio, meditamos cantando mantras, meditamos construyendo muros o trabajando la tierra... Meditar es practicar el AHORA, sin apegos y sin pensamiento, en cada ocasión posible.
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| cuecos tibetanos |
Y la CREATIVIDAD es otra de las actividades que cultivamos y provocamos. Adultos y niños buscamos espacios en el día para dejar salir la inspiración y plasmarla sobre algún soporte real. A veces se nos desborda y olvidamos alguna de las tareas no creativas que el día exige (jajaja!!), y casi siempre tras el acto creativo debemos recomponer el orden de la casa, que a veces sufre en el impulso de dar rienda suelta a la inspiración (!).
La creatividad, igual que la meditación, no necesita de grandes hazañas; se puede aplicar a cada rato del día, a la forma de tender la ropa, a la forma de poner la mesa y el lugar, a las plantas, los animales, los espacios, los juegos... además de al arte y todas sus manifestaciones.
El ejercicio contínuo de crear nos mantiene vivos e ilusionados, y nos acerca a otras personas que también andan creando...
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| primavera en un tablón abandonado |
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