Esta semana aprovechamos para hacer los últimos trabajos de exterior antes de que el tiempo nos obligue a pasar unos meses dentro de la casa. Estamos recogiendo las últimas hortalizas del huerto y empezamos a hacer conserva... aunque el huerto aún no es muy grande no logramos comernos en verano toda la producción.
Y con los restos de aceite usado en la cocina hemos hecho jabón casero, que utilizamos para frotar manchas y para la ropa muy sucia (mucho mejor que los detergentes industriales), y también para la piel; este jabón es una maravilla para curar dermatitis, lavar heridas y cuidar la piel seca en la ducha.
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